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Jerez de la Frontera: tierra del caballo cartujano, del toro de lidia, cuna del arte flamenco, ciudad del motor y centro monumental declarado de interés Histórico-Artístico. Y del 26 al 28 de mayo ciudad del vino.
El pasado domingo, 26 de mayo, ExtremaSensación viajó a Jerez de la Frontera para visitar el XII Salón Internacional Vinoble 2024.
A las 7 de la mañana, en Almendralejo (de la ciudad del cava a la ciudad de los vinos generosos) subíamos al microbús organizado por la Cofradía del Vino de Tierra de Barros y MAVEX (Mujeres Amantes del Vino de Extremadura) dispuestos a disfrutar y a sorprendernos con vinos únicos.
Llegamos al Alcázar de Jerez a las 11 y la ciudad nos recibió con un sol espléndido y una agradable brisa que nos acompañó durante todo el día.
El Alcázar de Jerez fue declarado monumento histórico-artístico por el gobierno provisional de la República en el año 1931.Y es a partir de 1998, cuando el edificio pasa a ser propiedad del Ayuntamiento de la ciudad y se abre al público.
Allí hemos podido hacer un viaje virtual por España, Canadá, Francia, Hungría, Italia, Japón o Portugal probando sus vinos, licores, cavas o vermús.
Vinos generosos españoles con los que poder disfrutar catas verticales y probar desde un vino fino a un oloroso, pasando por el amontillado y el palo cortado.
Hubo tiempo para acercarnos al mundo de los cream de la mano de bodegas históricas como William& Humbert o Ximénez-Spínola, a los fondillón de Alicante ,al vino de hielo de Canadá o a los Tokajis húngaros.
Todo un despliegue de aromas y matices a tostado, tabaco, café, frutos secos, uvas pasas...
Hemos podido conocer proyectos interesantes de bodegueros jóvenes que se proponen conservar tanto las tradiciones de sus vinos como apostar por innovadoras técnicas de vinificación.
Para ExtremaSensación se abre una nueva vía de experiencias con las que recorrer un mundo de sensaciones y viajes a través del vino.
